Oh, Santa Muerte, en este momento de reflexión y entrega, te pido que me ayudes a liberar el peso del pasado que tanto me agobia. Las experiencias vividas, aunque han sido parte de mi camino, a veces se convierten en cadenas que me impiden avanzar. Te imploro que me des la fortaleza para soltar esos recuerdos que me lastiman y que me enseñes a verlos como lecciones que han forjado mi ser. Con tu luz, deseo dejar atrás el dolor y abrirme a nuevas oportunidades que la vida tiene para ofrecerme.
Oh, Santa Muerte, al liberar el pasado, también busco la sanación de las heridas emocionales que han quedado en mi corazón. Cada cicatriz cuenta una historia, pero no quiero que esas historias me definan. Te ruego que me envuelvas en tu manto protector y me ayudes a sanar las partes de mí que aún sufren. Que tu energía me brinde la paz necesaria para perdonar, tanto a los demás como a mí mismo, y que pueda encontrar la serenidad en el presente, sin el lastre de lo que ya no puedo cambiar.
Oh, Santa Muerte, al soltar el pasado y sanar mis heridas, deseo abrirme a nuevas experiencias y relaciones que enriquezcan mi vida. Te pido que me guíes hacia personas que compartan mi camino y que me ayuden a crecer. Que cada encuentro sea una oportunidad para aprender y para construir la vida que anhelo. Con tu ayuda, quiero rodearme de amor y positividad, dejando atrás las energías negativas que me han acompañado. Que mi corazón esté dispuesto a recibir lo bueno que el universo tiene reservado para mí.
Oh, Santa Muerte, en este proceso de liberación y sanación, también busco la claridad en mis decisiones. A veces, el miedo al futuro me paraliza y me impide actuar. Te pido que ilumines mi camino y me des la sabiduría necesaria para tomar decisiones que estén alineadas con mi verdadero ser. Que cada paso que dé esté guiado por tu luz, y que pueda confiar en que estoy en el camino correcto. Con tu apoyo, deseo avanzar con confianza y determinación hacia un futuro lleno de posibilidades.
Oh, Santa Muerte, finalmente, agradezco por la oportunidad de renacer en cada nuevo día. Al liberar el pasado, sanar mis heridas, abrirme a nuevas experiencias y encontrar claridad, estoy listo para abrazar la vida con gratitud. Te pido que me acompañes en este viaje, que me des la fuerza para seguir adelante y que siempre me recuerdes que, aunque el pasado haya sido difícil, el futuro está lleno de esperanza. Con tu bendición, quiero vivir plenamente, disfrutando de cada momento y aprendiendo de cada experiencia que la vida me ofrezca.