
Trabajo digno
San José Obrero, enséñanos a valorar el trabajo como expresión de dignidad y amor a Dios. Amén.
El trabajo no es solo un medio de subsistencia, sino una oportunidad para glorificar a Dios. ¿Cómo puedes santificar tu labor diaria?
San José Obrero, ejemplo de humildad y trabajador incansable, vengo a ti con mi corazón lleno de gratitud y también de preocupaciones. Tú que supiste trabajar con amor, ofreciendo cada esfuerzo al Señor, enséñame a valorar el trabajo como un don y no como una carga. Ayúdame a enfrentar mis labores con responsabilidad, honestidad y dedicación, recordando siempre que lo que hago puede ser una ofrenda a Dios. Intercede por mí para que encuentre satisfacción en mis tareas diarias y para que, si enfrento dificultades en mi trabajo, no pierda la esperanza ni la confianza en el plan divino. Que con tu ejemplo aprenda a ser un trabajador digno, buscando no solo el bien material, sino también el crecimiento espiritual. Amén.
San José Obrero, gracias por tu ejemplo de laboriosidad. Que en mi trabajo siempre busque agradar a Dios. Amén.