Fe y esperanza
Virgen de Guadalupe, Madre amorosa, te pedimos que intercedas por nosotros en este momento de oración. Amén.
Reflexión sobre cómo la Virgen de Guadalupe nos enseña a tener fe y esperanza en medio de las dificultades.
Virgen de Guadalupe, tú que apareciste en el Tepeyac como signo de esperanza y consuelo para tu pueblo, te pedimos que renueves nuestra fe en tiempos de prueba. Que tu mirada de amor y tu intercesión nos den la confianza de que no estamos solos. Hoy, ante ti, te pedimos que nos ayudes a superar las adversidades que enfrentamos, con la certeza de que con tu apoyo todo es posible. Que, al igual que los indios que acudieron a ti, podamos confiar plenamente en tu amor y compasión. Te pedimos también por la paz en el mundo, que tu luz nos guíe siempre hacia el amor y la unidad. Amén.
Virgen de Guadalupe, fortalece nuestra fe. Amén.